Garbanzos: El Superhéroe Nutricional que Combate la Obesidad

El garbanzo es conocido por sus múltiples beneficios para la salud. Es rico en proteínas, lo que lo convierte en un excelente alimento para vegetarianos y veganos. También contiene fibra, que ayuda a la digestión y puede contribuir a la regulación del azúcar en sangre. Estudios han demostrado que el consumo regular de garbanzos puede mejorar la salud del corazón, reducir el riesgo de enfermedades crónicas y ayudar en el control del peso.

La deficiencia de nictronutrientes como el Se (Selenio) y el Zn (Zinc), están vinculados a problemas de salúd relacionados con la inflamación y el estrés oxidativo. La biofortificación de la harina de garbanzo con selenio (Se) y zinc (Zn) para abordar deficiencias de micronutrientes y mejorar las propiedades antioxidantes y antiinflamatorias de este alimento.

Los resultados mostraron un aumento significativo en los isoflavonoides tras el tratamiento con ZnSO4, siendo el malonilato de formononitina-glucósido el principal isoflavonoide encontrado. Además, los tratamientos con Na2SeO3 resultaron en la mayor acumulación de selenio. Todos los tratamientos exhibieron actividad antioxidante, con una reducción notable del 52 % en la producción de óxido nítrico en comparación con el control.

Estos hallazgos subrayan la importancia de la biofortificación como una estrategia efectiva para enriquecer la dieta con minerales esenciales y combatir el estrés oxidativo característico de la obesidad. La harina de garbanzo, al ser un alimento versátil y nutritivo, tiene el potencial de convertirse en una opción clave en la lucha contra la malnutrición y la obesidad.